La exmodelo acusó que, a diferencia de ella, Tonka Tomicic “sí estaba involucrada en el tema de los relojes. Entonces, no entiendo que me quiten la posibilidad de trabajar”.
Como “demacrada”, con 15 kilos menos. Así sería el complejo momento que estaría viviendo Titi Ahubert, la exmodelo que dio vida a la farándula chilena -tras ser mechoneada por Daniella Campos en los años 90- y que hoy enfrenta un nuevo caso mediático, producto de la detención de su marido Daniel Sauer por el Caso Audio.
En conversación con Revista Sábado reveló cómo fue que se enteró de los líos económicos que enfrenta su marido, quien está formalizado por emitir facturas falsas, lavado de activos, delitos tributarios e infracción a la ley del mercado de valores.
“Llegaron a las cinco y media de la mañana. Estaban mis hijos durmiendo y tuve que pedirle por favor a la PDI que me dejaran primero tocarles la puerta para que se vistieran. Fue muy duro. Nunca se me va a olvidar la imagen de él saliendo esposado. Me cuesta hablar de esto. Esto estalló, para mí, ahora. Yo no sabía nada. Para mí, esto fue ahora cuando se lo llevaron detenido”, contó al citado medio.
Además, explicó que se le han cerrado las puertas laborales producto de esto, lo cual considera una verdadera injusticia e hizo una comparación con la situación que enfrenta Tonka Tomicic -que hoy declaró como testigo en el Caso Audio y no dio declaraciones a la prensa-, quien sí pudo seguir trabajando, a pesar de que “ella sí estaba involucrada”.
“No quiero decirlo, pero a esa comunicadora famosa que estaba vinculada con el tema de los relojes y todo, ella sí estaba involucrada, ella sí percibió sus cheques, ella sí tenía cuentas bancarias. Yo no. Entonces, que te pisoteen, que te quiten la posibilidad de trabajar… Bueno, a lo mejor Dios me está preparando para algo mejor y más grande”, afirmó Ahubert.
Según contó, tras quedar sin ingresos y tener que vender su vehículo “para comer”, trabajó en un proyecto con radio Biobío, pero la congelaron puesto que su nombre aparecía vinculado al mediático caso judicial.
“Me dijeron ‘tenemos que congelar un tiempo’. El argumento era que yo era la esposa de Daniel Sauer. Y también porque mi apellido es Jalaff, que son mis primos, pero realmente no tengo nada que ver con ellos”, lamentó ella.
