Gracias al innovador medicamento de uso tópico creado por la empresa Athymia, con el apoyo de Corfo, los animales se están recuperando más rápidamente de lo normal.
Seis caballos fueron trasladados por personal del Ejército hasta el Hospital Veterinario de la Universidad de Concepción, en Chillán, para recibir atención médica tras sufrir quemaduras durante los incendios forestales en la Región de Ñuble.
Los animales, que provienen desde Quillón y Yungay, reciben un tratamiento complementario que consiste en la aplicación de un medicamento de uso tópico basado en el extracto de plantas, es decir un fitofármaco, que tiene buenos resultados en quemaduras y en el alivio del dolor. El producto fue desarrollado por la empresa Athymia y contó con el apoyo de Corfo.
“Hace muchos años empezamos a utilizar este producto en heridas o quemaduras en animales, por lo que cuando ocurrió esta emergencia quisimos donarlo, porque sabemos que funciona y permite acotar los tiempos de cicatrización. Hemos visto que los caballos se han recuperado bastante durante estos 15 días que llevan con el tratamiento y que el producto además funciona como analgésico y proporciona un alivio frente a estas quemaduras que son muy dolorosas”, explicó la doctora Florence Hugues, médico veterinaria que lideró la ejecución del proyecto.
En la misma línea, el mayor del Ejército, Sebastián Plass, comentó que se estableció un puesto de atención en la Escuela Rural de Cato que no cumplía con las condiciones adecuadas para la atención de los animales, por la presencia de polvo, viento y avispas, así que solicitaron apoyo a la Universidad de Concepción, el que fue entregado al facilitar el espacio para recibir a los caballos que tenían un importante porcentaje de su cuerpo quemado.
“Una vez que ingresamos a la Universidad, y guiados por el doctor Ignacio Cabezas, director del Hospital Veterinario, se empezó a aplicar este producto en los equinos, lo que nos permitió lograr una recuperación muy rápida respecto de otros puestos de atención de animales afectados. La efectividad de este tratamiento nos permitió dar de alta a dos caballos y dedicarnos a los más complicados”, detalló Plass.
El proyecto desarrollado por la empresa Athymia contó con recursos del programa Innova Región de Corfo, cuyo objetivo es apoyar el desarrollo de nuevos o mejorados productos, procesos y/o servicios, a partir de prototipos hasta su validación comercial, que aporten a la economía regional.
Según explicó el doctor Ignacio Cabezas, este desarrollo aún no está comercializado y están evaluando trabajar con una empresa española, con buenas prácticas de manufactura, para poder realizar el proceso de registro tanto del ISP como del SAG y así empezar a comercializarlo. “El registro del ISP nos permitiría trabajar además con humanos, en quemaduras, heridas complejas, úlceras crónicas y pie diabético”.
La directora regional de Corfo, Macarena Dávila, quien junto al seremi de Economía de Ñuble visitó el centro de atención, destacó la importancia del aporte que la empresa Athymia realizó en apoyo de los animales afectados por los incendios: “Este proyecto, que en un inicio fue planteado para tratar heridas del pie diabético, pero tal como nos explican los profesionales a cargo de este centro de atención y que hemos podido constatar en esta visita, funciona bastante bien para otras heridas complejas como quemaduras y úlceras. Esto da cuenta de la importancia y el valor que tiene la investigación y el desarrollo de productos innovadores en humanos y animales”.